120 minutos
6 raciones
Facíl
La tarta de calabaza es una de las recetas dulces más tradicionales de la cocina norteamericana, la pumpkin pie que preparan todos los otoños y que es una de las tartas más deliciosas y fáciles de preparar. Hoy te enseñamos a prepararla con calabaza ultracongelada, lo que te ahorrará mucho tiempo de cocinado de pelar y picar la calabaza.
El primer paso es asar la calabaza ultracongelada para preparar el puré con el que cocinaremos la tarta de calabaza ultracongelada. En una bandeja de horno ponemos papel de hornear y añadimos encima la calabaza ultracongelada. Horneamos durante una hora a 180 grados con el ventilador y calor arriba y abajo. Después trituramos la calabaza con la batidora y dejamos que se enfríe antes de usarlo.
El segundo paso es preparar la masa quebrada con la que haremos el molde para la tarta de calabaza. Tamizamos la harina de trigo en un bol y añadimos la mantequilla cortada en dados pequeños. Amasamos con los propios dedos y añadimos el resto de ingredientes: un huevo, sal, azúcar glasé y el agua fría. Mezclamos hasta que tengamos una masa uniforme y la envolvemos en papel film. La introducimos en la nevera durante media hora.
Precalentamos el horno a 180 grados con calor arriba y abajo y ventilador. En una superficie plana estiramos la masa con rodillo hasta que tenga un groso de 1/2 centímetros.Colocamos la masa en un molde para tartas y presionamos con los dedos hasta que tenga la forma del molde. La pinchamos con un tenedor en toda la superficie de la base. La horneamos durante 15 minutos vigilando que la masa no suba mucho.
En un bol, añadimos el puré de calabaza, junto con los 100 gramos de azúcar, una pizca de sal, un huevo y todas las especias. Mezclamos bien hasta que tengamos una masa homogénea. Añadimos la leche evaporada y volvemos a mezclar bien todos los ingredientes con cuidado de no generar espuma.
Precalentamos el horno a 200 grados. Vertemos la mezcla del relleno en la masa quebrada. Lo horneamos todo durante 10 minutos y bajamos la temperatura del horno a 180 grados. Horneamos la tarta durante media hora. Puedes pincharla con un palillo para comprobar que esté bien cocinada.
Sacamos la tarta del horno y dejamos reposar durante un día en la nevera ¡Y ya tenemos lista nuestra pumpkin pie otoñal!